Etiquetas básicas: 2do Año

lengua, matemática, francés, biología, ciudadanía, arte, plástica, TICX, history, EM, ELT, writing, literature, literature and drama, historia, geografía, físico-química, 2ºsec, 2017

viernes, 20 de mayo de 2016

Mentir para decir la verdad



 -En clase vimos un vídeo en el cual Liliana Bodoc, escritora de libros juveniles, da una charla TED   para ellos, los jóvenes.



  En su charla habla de las palabras, las palabras poéticas. Nosotros somos palabras, es una parte de nosotros tal como los huesos o los nervios. Las palabras poéticas dicen lo que no dicen, el pensamiento poético sirve para conocer de una forma diferente algunas cosas que te pueden explicar un científico pero no con la sencillez y la forma décima que lo hace un poeta. En general la gente no lo usa tanto, lo olvida, o como dice ella “lo deja en el cajón de los repasadores”.
 
   La poesía es puro silencio. Los poetas hacen que el silencio diga lo que ellos quieran que diga, que nos explican el mundo en donde vivimos. Por ejemplo un autor chino anónimo describe un acto sexual sin usar ninguna palabra directa, específica e implícita sobre el tema.

  También habla sobre la mentira. Ella mentía, pero no para su favor, sino que fabulaba. Le cuenta al público una de sus mentiras, en la que le dijo a sus amigas que había estado ciega toda la mañana. Obviamente no le creyeron, pero en realidad si andaba de una forma en penumbras ya que su madre había fallecido pero era su forma de explicarlo, de decir la verdad.
 
  En el final describe cómo sin mover ningún objeto puede generar algo en cualquiera, un sentimiento de tristeza o de enojo, intriga y hasta incomodidad. Depende como uno le habla a el otro le puede provocar cualquier sentimiento.


-Laura nos pidió que elijamos una anécdota de nuestro pasado en el que hallamos mentido. Primero poner la verdad y luego toda la mentira.

Verdad: Todos los años yo me voy con unos amigos a Córdoba y siempre nos metemos en ríos y ollas. Siempre nos tiramos de piedras altas de cabeza, clavado y demás, pero las últimas veces nos empezamos a tirar de mortal. Pero cuando fuimos a la más alta de todas me tire yo primero de mortal, pero me rompí toda la espalda. Mi amigo no se dio cuenta y cada vez que se tiraba después me tiraba yo diciendo que me había tirado de mortal.

Mentira: Con un amigo nos tirábamos de piedras gigantes. Todos los días nos tirábamos de diferentes formas pero desde un día, el día que la probamos, nos empezamos a tirar siempre de mortal, para adelante y para atrás.

3 comentarios:

  1. Hiciste un excelente relevamiento de la charla Ted. Tu texto es muy completo y claro.
    En la anécdota se vuelve un poco confusa la frase "me rompí toda la espalda". Tratándose de la verdad, el lector piensa que debe tomarlo literalmente. ¿Cómo es posible que tu amigo no se haya dado cuenta de que te rompiste la espalda?
    En la mentira, la diferencia no es tan grande con la anécdota verdadera. Deberías haber exagerado más para que se note la diferencia.

    Muy Satisfactorio

    ResponderBorrar
  2. Es una pooooooooorqueeeeeeriiiiiiaaaaaa!!!!!

    ResponderBorrar